Cuando se piensa en Rusia, vienen a la mente las planicies siberianas y la arbolada taiga. Sin embargo, en el país también hay montañas muy altas.
El pico más alto de Rusia y de Europa, y el décimo más alto del mundo, es el monte Elbrús, ubicado en la cordillera del Cáucaso y en la República de Kabardino-Balkaria, perteneciente a la Federación Rusa. Su altura es de 5,642 metros.
Aunque se le conoce como un monte, es de hecho un volcán en reposo con dos domos. Su nombre proviene del persa, pues los dominios de Irán llegaron alguna vez hasta este pico.
El monte Elbrús se formó hace 2.5 millones de años. Se dice que fue aquí donde Zeus encadenó al titán Prometeo, quien robó el fuego de los dioses del Olimpo.
Aunque los dioses lo conocieron hace mucho, los seres humanos llegaron al Elbrús hasta 1829 mediante expediciones costosas. En 1997, otra expedición ascendió a uno de los picos en una Land Rover, obteniendo un Récord Guinness por la proeza, que se llevó 45 días.
Aunque todos los miembros de la expedición sobrevivieron, el que no corrió con suerte fue el automóvil, que aún yace en una de las laderas del Elbrús. Desde 1990 hay competencias para llegar a la cima.
El Elbrús es tan solo 216 metros más alto que el volcán Popocatépetl.
(Autor: Rainer Matos)