El Borzoi ruso, también conocido como galgo ruso, es una raza canina desarrollada en Rusia desde la Edad Media, criado originalmente para cazar lobos y liebres. Su tamaño, velocidad y fuerza le convierten en un cazador excepcional.
El Borzoi es descendiente del galgo árabe y fue muy popular durante el tiempo de los Zares, ya que la persecución de lobos era habitual entre la aristocracia rusa. El Gran Duque Nicolás fue un asiduo criador de esta raza y se dice llegó a tener alrededor de un centenar de ejemplares.
Respecto de su carácter, el Borzoi es un perro cariñoso, pacífico, inteligente e independiente. Sin embargo, debido a su fuerza y velocidad innatas, requiere hacer ejercicio a diario, correr y dar largos paseos.
Su esperanza de vida es de entre 11 y 13 años.
Durante casi un siglo, esta raza ha sido criada fuera de Rusia exclusivamente para la compañía. Más allá de sus habilidades como cazador, se ha convertido en un compañero dócil para personas de cualquier edad. Su aire de elegancia, combinado con sus características atléticas y su apacibilidad e inteligencia hacen al Borzoi una raza muy especial.